[Volver al índice de obras]
Pasar por tu delante,
correr por tus caminos,
combatir contra enemigos
esperando un rato mirarte.
Tus ocho combatientes
que cuidan de tu vida
es tan sorprendente
que por ti sacrifiquen cada día.
Rey mío
que todos cuidan tu paso
con enroques, con peleas
aunque a veces ni lo veas.
Tus dos caballos
fieles amigos son,
brincan, galopan
y suelen ser tu salvación.
Dos grandes torres
tu palacio construyen,
dos grandes torres
que si las miran huyen.
Tanto amor te tienen
que hasta tu familia está,
tus hermanos alfiles
morir ,no te dejarán.
Y yo, ¿yo qué soy?
Tu reina oculta que protegerte busca
te escolto, te cuido, aunque surjan tormentos,
y evito en tu presencia soltar lamentos
porque mi corazón late, late fuerte
pero, por tu indiferencia hace mucho ha muerto.
Seudónimo: Lelo