Manny el monstruo


MANNY EL MONSTRUO

En un lugar no muy lejano se encontraba una zona muy rara, eran seres muy diferentes a los humanos, pero parecían monstruos.
Existía dos tipos de monstruos: unos buenos y otros malos. Hoy les hablaré de los monstruos malos, les platicaré de Manny, un monstruo muy gruñón y sobre todo muy ambicioso. Este era grande, musculoso, llevaba cachos en la cabeza, era como toro y mitad humano, el caso es que no les agradaba a todas las personas.
A este no le interesaba, tenía un problema que lo hacía más cruel, era muy pobre; pero él quería ser millonario, tenía su familia, pero siempre los trababa muy mal, sus padres lloraban. Luego en su barrio encontró, a unos monstruos que existían, un pueblo que era súper millonario, pero tenía que pasar por demasiados obstáculos, sitios tenebrosos, pero Manny decidió ir y tener dinero, solamente el dinero.
Les contó a sus padres y hermanos, quienes le dijeron que no llorara, pero no quiso escuchar nada y se fue alistando todas sus cosas, ya que si llegaba tendría todo.
En aquel lugar, se abrieron como cosas pegajosas y el seguía cayendo, y de pronto como corriente eléctrica comenzaron a golpearlo, el solo gritaba aterrorizado.
Llegó a un bosque en la que, según una leyenda, si te quedabas dormido nunca más despertarías, pero él en su ambición quería lograrlo, caminaba y quería dormir, solo iba arrastrándose por no querer quedarse ahí, miraba muchas personas durmiendo, caminaba no quería quedarse, y logró salir de aquel lugar muy satisfecho, ya que tan solo como era un monstruo resistiría más que los demás. 
Aquel monstruo caminaba cansado y un niño se le aparece, él era muy cariñoso con los niños, le encantaba y aquellos demonios lo sabían que su debilidad era los niños, Manny lo cargó y dijo: ¿Pequeño por qué lloras? El niño estaba echada en sus hombros y no le respondía a Manny, lo miró bien y el niño se convirtió, tenía la cara de un niño deformado con una boca muy enorme, llena de sangre y sus ojos volteados, Manny se aterrorizo mucho y escapó corriendo.
Cansado, decidió descansar y se sentó, pero se abrieron unas puertas muy extrañas, eran muy hermoso, al entrar observó hermosas flores; Manny pensó, esto no está tan mal. Manny entró y cayó a un agujero, había muchos cantantes, un cantante que se hizo demasiadas cirugías teniendo fama, pero vendiendo su alma al diablo. Manny aterrorizado observó y el bailaba sufriendo encima de unos clavos con pasos muy impresionantes, la misma que le llevaba a la fama, el pedía piedad, pero aquellos seres con cola y cacho solo se burlaban de él. 
Manny muy asustado, quiso salir, pero sin que nadie lo mire, porque sino iba a ser torturado, caminó un poco y encontró a otro personaje muy bondadoso, que casi todos solo le piden favores cuando lo necesitan, pero este hombre nunca los olvida y solo esperaba que la gente o sus hijos muy buenos vayan a su reino. 
Aquel cantante,  él se acordó que era muy ambicioso y que también vendió su alma a un ser malvado y va sufriendo tortura cruelmente parado de cabeza y golpeándole con palos de cuchillas, él pedía piedad, en ese momento se apareció, ese hombre tan bondadoso pero solo lo miró y se volteó, llevaba una túnica blanco, su cabello era un poco largo, Manny no llegó a ver bien, pero lo que si vio o escuchó  que aquel famoso le dijo ten piedad de mí y como el hombre solo se volteó  este famoso lo maldijo.
 Manny no sabía que temían a su líder, pero igual no quería seguir en aquel lugar, al ver solo llantos y fuego hizo lo posible por escapar y aquel hombre tan bueno lo ayudó y le dijo: “Hijo arrepiéntete”. Manny logro salir, pero no entendió por qué le dijo, continua su camino y de pronto llegó al lugar que tanto quería, fue feliz, su ambición crecía, la gente tenía un rey muy supremo, lo votaron de aquel lugar, Manny llorando no quería irse, pero con aquel poder de aquel líder, lo votaron, al llegar a su casa su familia estuvo feliz de verlo.
 Manny quería esa vida y como no podía volver solo se quedó ahí, sus padres ya eran viejito, no podían trabajar, sus hijos no se apiadaban de ellos, entonces al ver esa situación, el padre consigue un cobre en la que le pone vidrios con un mensaje adentro.
Los monstruos al ver el cofre, preguntaron que había ahí, pero su padre no les dijo nada, los hijos venían más seguido para saber, y así los padres, ya ancianos tenían comida hasta que un día se murieron y la crueldad de sus hijos, solamente ansiosos abrieron ese cofre y solo decía honraras a tu padre y a tu madre, los hijos se miraron y lloraron poniéndose a pensar todo lo que hicieron.
Manny le pidió perdón, pero era demasiado tarde, ya estaban muertos, solo se quedó triste y dijo, perdí a mis padres y ni los disfruté por mi ambición, perdónenme llorando dijo y solo Manny quiso cambiar su vida formando una familia y contando su historia.
Seudónimo: “Anayeli”